No son casos excepcionales. A muchas mujeres les interesan mucho los hombres con anillo al dedo y se entregan a la aventura a cualquier precio. ¿Qué lleva a las mujeres a sostener y elegir este tipo de relaciones en las que suele haber una gran dosis de sufrimiento?
1. Porque hacen y tienen lo que quisiéramos para nosotras: una esposa, una casa, un trabajo, una familia.
2. Porque nos encanta pensarnos destruyendo esa estructura para repetirla ipso facto pero con nosotras.
3.Porque estamos convencidas de que lo único que le pasa al casado es que se equivocó de señora.
4.Porque no hay nada más atractivo que descasar a un casado y hacerlo nuestro.
5. Porque es un trámite más rápido en nuestro objetivo “varón candidato a marido”.
6. Porque un tipo que fue marido y padre durante tanto tiempo debe ser un buen tipo.
7. Porque queremos que finalmente sea feliz y no sufra más soportando a esa bruja.
8.Porque tiene todas las condiciones y recursos y no los disfruta.
9. Porque no hay mejor amante que un casado que resuelve sus históricas y eternas frustraciones intimas con nosotras.
10.Porque encontrarnos con él es lo que más se parece a ver a un chico en el circo, tan feliz, tan agradecido.
11. Porque nos permite jugar a la víctima sin reparos, nos deja, nos quedamos solas, nos bancamos su ausencia, nos las arreglamos como podemos, los fines de semana lloramos por él y gozamos imaginando su culpa por abandonarnos.
12.Porque somos tan buena gente que no le hacemos quilombo en su vida y el bien sabe que si quisiéramos podríamos.
13. Porque nos da tiempo a ponernos espléndidas en cada encuentro (bañadas, depiladas y perfumadas) y no como ella que siempre tiene olor a ajo.
14. Porque somos el amor de su vida… qué duda cabe.
15. Porque se nos perdona todo, y todo es mucho, dado el sacrificio que padecemos por no poder él estar a nuestra altura.
16. Porque tenemos otorgados todos los derechos de engañarlo si se nos antojara.
17. Porque es fantástico acompañarlo y sostenerlo en sus tantos problemas pero no tenemos que ocuparnos de ninguno.
18. Porque somos tan dadoras.
19.Porque no tenemos que pagar por nada y… De nada, faltaba más.
Y, lo más importante, porque competimos con otra mujer. Y ahí está, tristemente, la gracia: el hombre es una circunstancia.
Reflexiona lo que lees , si tu eres una de esas mujeres a las que le atrae un hombre casado .